Carolina siempre soñó con llevar la vida sin ataduras de las camareras de Hollywood.
Ya sé lo que deben estar pensando, soy una niñita rídicula por decir que siempre quise ser mesera; tristemente es algo que no puedo sacarme de la cabeza. No crean que no sé exactamente de dónde viene mi deseo de atender mesas, llevarle a los clientes sus pedidos, y robar una que otra papa frita de la cocina. Mi deseo infantil de ser mesera viene de Hollywood, pues sí señores, es el cine el culpable de que la respetada profesión de servir mesas se haya convertido en una actividad pendiente en mi lista de cosas para hacer antes de morir.
Las meseras en las películas siempre tienen historias interesantes detrás, siempre que terminan su tedioso trabajo, -tedioso, y mal pagado- vuelven a sus apartamentos en ciudades excitantes del mundo, a seguir con sus aún más excitantes vidas sociales; lo que me lleva a mí a preguntarme si acaso una carrera modesta, una profesión infravalorada es equivalente a una vida de aventuras y riesgos. Si lo pensamos bien, una mesera estilo Hollywood tiene más posibilidades de hacer lo que ella quiera con su vida, no tiene que preocuparse de status ni de ascensos, pues ella conoce sus posibilidades, y de antemano reconoce que no hay mucho que pueda hacer para llevar su vida profesional a otro nivel. Esa imagen de que la mesera puede cargar su vida en una maleta y vivir libre de ataduras es simplemente irresistible. Claro, me gusta el cine, me gusta una que otra película rosa, pero no soy estúpida, las meseras que pertenecen al mundo real seguramente tiene otro tipo de problemas que les impide andar pensando en fugarse con el hombre de traje que dejó la más alta propina, solo -solo- para llamar la atención de la atractiva mesera (es Hollywood, por supuesto que la mesera siempre es atractiva).
Al final no se trata entonces de ser mesera, se trata de esa idea de libertad plasmada en la gran pantalla que me atormenta desde siempre, la idea de que si empaco mis trastos y me voy a vivir a un pueblo donde solo se puede andar a camello es mi problema, y de nadie más. Tristemente esa idea hollywoodiense no pasa de ser un mecanismo sensacional para vender películas, muchas veces inspiradoras, sobre gente que se pasa la vida buscando su ser a través de los viajes. La verdad cruel del asunto es que andar por la vida entre divagaciones y planes fugaces es muy difícil, es más, me atrevería a decir que la libertad es un privilegio de pocos. ¿A qué me refiero con libertad? Bueno, en esta ocasión me refiero a ese control absoluto que se tiene del destino propio, poder decir un día cualquiera: –olé que jartera este país, me voy para Shangai, o también, por ejemplo, -Yo me cansé de este pelo horroroso, quiero ser calva y tatuarme la cabeza-. Y aunque ese tipo de decisiones no pueden tomarse con una cabeza caliente -como permanece la mía-, díganme, sinceramente, si no sería deliciosa la vida de esa manera, al estilo mesera hollywodense.
Lo cierto es que ella al final resulta siempre casada, eso si, con el amor de su vida, siempre resulta con un mejor empleo, porque de alguna manera durante la película desarrolla una habilidad desconocida que la salva de su trágica profesión; la mesera terminá siempre feliz, siempre dejándo atrás un pasado lleno de días grises y malas propinas, y termina encaminada a una vida llena de nuevas aventuras, desafíos y opulencia. En fin ¡siempre quise ser mesera! y encontrar ese rincón prometido de libertad absoluta.
Carolina Rodríguez Mayo (Belo Horizonte, Brasil)
Artículo originalmente publicado en http://desvariodeunasonadora.bligoo.cl/
28 Comentarios
Cuando tenía 21 años fui mesera en una cafetería, y digamos que el pago era muy pobre, lo bueno es que en aquel entonces vivía en casa de mis padres y por tal motivo mis gastos no eran excesivos. El verdadero motivo por el cual termine ejerciendo ese oficio es porque mi sueño era trabajar en una cafetería y aunque mi anécdota no es de tipo Hollywood, les puedo compartir que me dejo muy buenas experiencias aunque no me libre de los clientes difíciles, me puedo identificar con este articulo ya que me daba tiempo de hacer otras cosas debido a que trabajaba de jueves a domingo y no puedo pasar por alto que me termine enamorando de un cliente que visitaba el lugar con frecuencia, salimos un par de veces y se rompió el encanto (como les mencione, no es de tipo Hollywod), confieso que es de los trabajos que más he disfrutado, aunque por una extraña razón si me preguntan si volvería a hacer mesera mi respuesta es ¡NO! irónico pero real…
Muchas gracias por tu comentario. Evidentemente hay una gran diferencia entre la ficción y la realidad en este trabajo. Disfruté mucho de tu historia.
Yo fuy mesera, y si lo fueras un par de dias, lo mas probable es que ya no quieras serlo jamas
pues es tedioso, atender mas de 3 mesas al mismo tiempo, y tener que hacerlo rapido, sentir la presion de la gente, yo creo que nunca tuve el sueño de querer serlo, pero cuando he podido ha sido mi trabajo por unos meses, porque para una chica joven, no cae mal, y si te posicionas en un buen restaurante, ubicado en una buena zona, haces buena propina y aveces puede superar tu sueldo, bueno, no creo que jamas llege a ser mesera en holywood pero quien sabe, que edad tienes? es necesario ser mayor de edad para ese trabajo, si deseas me agregas al facebook, para charlar..saludos.
Es algo que puede discutirse, pues hay muchos papeles de mujeres poderosas también con grandes sueldos, eso si, a veces ellas no tienen éxito en su vida personal como uno ve que pasa con varios personajes másculinos.
Puedo imaginarlo, sé que no ha de ser un trabajo fácil. Es por eso que lo considero admirable, y bueno, debe ser también por eso que Hollywood ha decidido usarlo en tantas historias que ya ni pueden contarse. Por supuesto soy mayor de edad, así que supongo que tengo tiempo de ser mesera algún día y ver qué pasa. Descubrir la verdadera frontera entre ficción y realidad.
Un saludo especial.
Es gracioso si nos ponemos a comprar al hombre «libre» de Hollywood y a la mujer «libre» de Hollywood… En este caso siempre se ve al hombre con éxito, dinero, un buen trabajo, etc…Sin embargo, a la mujer siempre se le ve en una situación inferior, véase ser camarera…En fin, a eso nos reducen….
las chick flicks se nos han cagado la vida…
Hahahahaha nos han puesto estándares altos, altos.
Muy buen artículo! A mi me han enseñado desde pequeña a seguir mis sueños, y sí uno va creciendo y poniéndose uno mismo los límites. Hace 5 meses me fuí de mi país natal, y a todas las fridas les digo que se puede tener locuras de sueños que se cumplen, basta con salir de la zona de confort que todos tenemos y nunca NUNCA esperar que nadie nos venga a rescatar, no hay peor cárcel que las barreras que las uno construye. Me encanta la revista las sigo siempre genias! Me siento una más de ustedes leyéndolas, gracias por eso. Saludos!
¡Yo también salí de mi país hace 6 meses! Nada tan desafiante como un viaje al exterior. Gracias por tu comentario, me alegra que te sientas parte de la familia de Fridas, ese es uno de los objetivos.
me gusta soñar también esperando que se cumplan los sueños
«Para que pies, si tengo alas para volar.» Frida Khalo.
carito encontre encantador tu post!, leí el titulo y quede como ¿¿¿que???? ajjajaja me senti identificada no así con el post en sí, si no con la idea misma de tener una aventura a veces como las que se muestran en mis peliculas. Envolvedor 🙂 un abrazo y sigue escribiendo! ^^
Muchas muchas gracias por tu comentario 🙂
Es muy interesante como muestras el efecto de las películas en los sueños de las personas. La idealización de una profesión que en realidad es dura, acá y en cualquier parte del mundo.
Cierto, el cine idealiza muchas profesiones y les da un carácter sensacionalista que puede ser todo lo opuesto a la realidad.
Muy interesante e inspirador.
Me gustaría leer más de estos artículos.
Ya quiero leer los libros de esta autora!
Muchas gracias 😀
Excelente artículo, muy interesante.
Muchísimas gracias.
Solo los sueños se hacen realidad cuando llegan del alma las grandes decisiones de la vida
Excelente artículo el cual le hace pensar a uno de los roles de la vida y de la importancia que se tiene para lograr metas y objetivos
Los sueños son para llevarlos a la realidad, hay que ser muy valiente.
excelente articulo, me gusta ,mucho la similitud de la realidad vs la fantasia
¡muchas gracias!
Los Chick flicks nos hacen tener esa clase de sueños compartidos, que realmente espero que a alguna de nosotras se nos cumpla (ojala esa sea yo) Hollywood no nos puede cobrar por soñar. Que identificada me senti al leer este articulo
muy buen articulo tiene ficción y algo de realidad
¡Espero que pronto seamos protagonistas de nuestro propio chick flick!