Reciclando tu armario.
Decenas de prendas acaban cogiendo polvo en nuestro armario porque encogieron, despintaron, apareció una mancha o un agujerito o, simplemente, te dejaron de gustar. Nada que un poco de imaginación y un ratito de paciencia no pueda solucionar.
En noviembre hablábamos de moda ética y de las posibilidades que teníamos a nuestro alcance para promover un consumo responsable. Pero como la teoría es una cosa y la práctica es otra, este mes os traemos opciones reales para darles un futuro mejor a esas prendas que ya no usas. Hemos reunido algunas sugerencias que os servirán de inspiración a la hora de renovar vuestro vestuario y tres tutoriales super básicos aptos para manitas y manazas. ¡Vamos al lío!
Camisetas
¿Cuántas camisetas tenéis? ¿cuántas os ponéis? Es la prenda que más abunda en nuestros armarios… y en nuestros cajones del olvido. Por suerte, es también la más versátil y nos permite hacer un montón de cosas útiles. Si la camiseta os gusta, tiene un estampado bonito o le tenéis un cariño especial, podéis convertirla en una falda, hacer un cojín o enmarcarla para decorar vuestro rincón favorito.
Si está manchada, rota y no hay por donde cogerla ¡que no cunda el pánico! Podéis hacer tiras con las que tejer alfombras, cuencos, portalápices…
Y, para quién no quiera complicarse nada de nada, ¿qué os parece convertir una camiseta en una bolsa sin tocar una aguja?
Pantalones
Quizás los pantalones no den tanto de sí como las camisetas, pero siempre hay opciones para darles una segunda vida. Aprovechando la parte superior, podéis estrenar falda nueva en menos de media hora. También podéis aprovechar los bolsillos traseros para hacer organizadores de pared o salvamanteles.
Recuerdo que de pequeña hice un bolso con un pantalón vaquero que ya no me servía… si yo pude con 10 añitos, estoy segura de que cualquiera puede hacerlo 🙂
Vestidos
La mayoría de los vestidos pueden convertirse en una camiseta o una falda de la forma más fácil del mundo. Además, podéis aprovechar la parte delantera para hacer un delantal muy original.
Este vestido encogió y me quedaba demasiado corto, así que simplemente corte por debajo del pecho, hice un dobladillo simple e introduje un elástico para ajustar a la cintura.
Y ahora ¡manos a la obra! Seguro que vuestros armarios están llenitos de diamantes en bruto 😉
Si queréis un paso a paso de algún tutorial en concreto o necesitais ideas para transformar alguna prenda, no dudéis en escribirnos. ¡Queremos ver vuestras creaciones!
Rocío
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