El yoga es más que una práctica deportiva. Alexia nos explica diferentes estilos y sobre cómo esta disciplina transformó su vida.
Era por ahí el año 2002, una oscura tarde en el sur de Londres. Salí de currar, y siguiendo un mapilla en un panfleto, llegué a una puerta enana y llena de graffitis. Llamé al interfono y se abrió la puerta. Subí por una escalera que progresivamente se hacía más cómoda y limpia y llena de vida. Y llegué al estudio. Era una sala blanca, preciosa y enorme, llena de ventanales, con el suelo de roble viejo. Había estatuillas de deidades hindús, velas, incienso, mucha gente que parecía feliz, pelos largos, paz.
Para mí eso era lo más cercano al paraíso que había pisado desde que llegué al Reino Unido. Vino la profesora a hablar conmigo. Mujer de unos 40 años, rubia y con semblante semi-orgásmico, me preguntó mi nombre, lo apuntó y me explicó lo que iba a suceder durante mi primera clase de yoga. Me dio una esterilla, me puse en primera fila y esperé. Al cabo de 5 minutos, la profe se puso delante de nosotros, cruzó las piernas, puso las manos a la altura del corazón y «OMMM». Flipé.
Ahí mismo, en ese mismo momento me enganché para siempre, y en ese momento supe que quería hacer del yoga mi vida. Y así fue. Ahora, 12 años después, habiendo dado clases durante más de 8 años en diferentes continentes, mi visión del yoga no ha cambiado. Sí del mundillo del yoga, pero no de la disciplina. Os cuento.
El yoga, para las que no sepan, es una serie de ejercicios milenarios, de estiramientos y fuerza, que se combinan con la respiración. Tiene sus orígenes en India, 3500 ac, donde se utilizaba, y todavía utiliza, como método de sanación de cuerpo y mente, de control de los pensamientos y emociones y también como preparación y rutina para los que decidan tener una vida dedicada a la religión.
Además de los ejercicios físicos, de respiración y meditación, el yoga trae consigo un código de comportamiento y unas rutinas limpiadoras de lo más heavies.
El código de ética, una especie de mandamientos del buen ser, se llaman Yamas y Niyamas y son los siguientes:
Yamas
- Ahimsa: No violencia (de aquí el vegetarianismo).
- Satya: Veracidad.
- Asteya: No robar.
- Brahmacharya: No excesos.
- Aparigraha: No posesividad.
Niyamas
- Saucha: Pureza
- Santosha: Contentamiento.
- Tapas: Autodisciplina.
- Svadhayaya: Autoestudio.
- Ashvara Pranidhana: Rendición a lo ¿divino?
Pero el yoga es mucho más. Yo lo he practicado mucho y os digo que es magia. Es como rezar con el cuerpo, lejos de cualquier religión. Es como un código de estrellas que abre la puerta de una parte de tu alma que no conocías. Y tu vida se vuelve mejor. Y tu salud se vuelve mejor, y estás más feliz. Y os lo digo yo que odio los fanatismos. Es maravilloso.
TIPOS DE YOGA
Mira, igual te imaginas que hacer yoga es o quedarse quieto y respirar por horas y convertirte en un pretzel. La verdad que hay muchos tipos, aquí os dejo una lista de los más conocidos, pero hay muchos más.
- Hatha: El yoga clásico, es bastante estático, se va cambiando de postura, pero en plan tranquis. Se enseña también respiración (pranayamas) y a veces un poco de meditación.
- Vinyasa: Secuencias cambiantes de posturas que se unen unas con otras y se suda y mucho. Muy apto para fans del spinning y el body pump. Cardio, estiramientos y musculación y un poco de OM, claro…
- Ashtanga: Disciplina, casi militar, ideada por Sri Patthabi Jois, que consiste en tres secuencias de posturas fijas. Se debe practicar todos los días, menos el sábado y en luna llena. Dos horas y media de práctica. Lo hice durante dos años y me convertí en la prima de Mazinger Z.
- Bikram: Secuencia fija de posturas, por suerte, bastante estáticas, que se practica en una sala calentada a 40 grados. Para mí un infierno, pero hay mucha gente que le encanta y es un detox brutal. El señor que lo inventó es un abusador, igual por eso le tengo más manía.
- Iyengar: Yoga estático, en el que lo más importante es hacer las posturas perfectamente y mantenerlas mucho rato. Duro de narices, pero se aprende mucho, la verdad.
- Yin: Yoga de estiramientos profundos y respiración pausada pero constante. Se utiliza la fueza de la gravedad para abrir articulaciones y estirar músculos. A mí este me encanta, pero reconozco que no es para todo el mundo.
- Nidra: O yoga del sueño. Es en realidad un estado de vigilia o semi-hipnosis inducido por el profe, que crea una ventana a nuestro inconsciente. La hipnosis clínica de los yogis.
El tema está en probar varios y encontrar cual es que se ajusta más a tu personalidad.
BENEFICIOS PARA LA SALUD
Incontables e innumerables, pero os voy a hacer un resumen para no aburriros mucho.
- Lo más importante es que se combinan los ejercicios físicos con la respiración consciente. Eso, por una parte te aporta herramientas para auto-regularte en momentos de ansiedad y estrés y por otra parte baja tus niveles de cortisol, la hormona de estrés, así directamente muerte al estrés.
- Al reducir la hormona del estrés, que es contraria a la testosterona (hormona masculina por excelencia) y a la progesterona (hormona que segregamos la última parte de nuestro ciclo y también durante el embarazo), nuestro sistema hormonal, con el tiempo, se regula. Regulación hormonal al canto.
- Otro beneficio muy interesante es el dormir mejor. Está demostrado que el yoga regula la secreción de una hormona que tiene un papel clave en nuestro sueño; la melatonina.
- El hecho de moverse y estirar el cuerpo hace que nuestro cuerpo segregue hormonas relajantes y del buen rollito además de tonificar los músculos y lubricar nuestras articulaciones.
Y así podría estas mucho más rato, pero os hacéis una idea.
Lo que me da pena es que el yoga se ha convertido en un circo. Un circo que alimenta a profesores que rebosan ego y se mueren por que les hagan caso. Un mercado en el que se mueve mucha pasta, sobre todo en EEUU, que eleva a categoría de líder espiritual a personas que no deberían tener ese puesto. Por muchos motivos.
Una manera de huir de la realidad y pensar que sólo practicando yoga, ya has aportado tu granito de arena al mundo de los mortales. Y sobre todo, una manera de juzgar a los que no pratican yoga o no son vegetarianos o les mola el spinning.
Pero en el fondo está en tu mano Frida, lo que tú vayas a hacer del yoga, porque sí, es el deporte del alma. Y cada una conoce la suya.
OM, namaste.
6 Comentarios
Me ha encantado el post, pero he de decir algo; el yoga no son los ejercicios («El yoga, para las que no sepan, es una serie de ejercicios milenarios, de estiramientos y fuerza, que se combinan con la respiración.»), el yoga es mente, cuerpo y alma, es un estilo de vida. «Mente sana en cuerpo sano». En realidad el yoga se divide más bien en caminos, no en tipos. Los caminos del yoga son: Bahkti (devoción), Gyana (estudio de textos, adquirir sabiduría, etc.), Karma (acciones), Mantra (sonido, palabras…) y finalmente Hatha (parte física, el ejercicio físico). Así que todos los tipos de yoga que mencionas son tipos de Hatha, todos ellos, Bikram, Yin, Vinyasa (…), son parte del Hatha, el cual a su vez es un camino del yoga. Desgraciadamente los términos y caminos se han ido perdiendo con la popularización del yoga, lo cual es muy triste, pues el yoga como estilo de vida, en todos sus caminos, es mucho más hermoso que practicar únicamente Hatha.
¡Saludos! 🙂
hola! has probado o oido hablar del acroyoga en pareja? yo vivo en italia y aqui esta entrando piano piano… me parece precioso! aunque si al principio, resulta mas divertido que espiritual, pero cuando se va pillando practica…!
namaste 🙂
Hola! Hace tiempo que me viene interesando el tema de practicar yoga pero me d algo de miedo/vergüenza (tengo problemas de ansiedad social, justo eso es lo que vengo intentando superar) preguntsr en centros de mi ciudad porque tengo un sobrepeso importante de unos 30 kg. Qué tipo de yoga me recomiendan y creen que pueda hacerlo? Eso, muchisimas gracias.
Hola, Jaby, yo te recomiendo todos los caminos. El yoga se divide en caminos, no en tipos, y son seis; Bhakti (devoción), Gyana (estudio), Karma (acciones), Mantra (la parte oral, como el Ohm), Hatha (ejercicio físico) y Raja (o a veces llamado Ashtanga en pocos países, es el yoga mental). Yo te recomiendo todos, si te refieres a la parte física entonces está el Hatha, el cual sí tiene tipos, y son los que Alexia enlistó, pero de nada sirve practicar Hatha sin practicar los demás caminos. Yo soy fan del Kundalini. Yo practico yoga desde hace años, y al lugar al que voy va gente de la tercera edad (muchos están enfermos), gente con sobre peso, gente con problemas de la columna, en fin, parece que todos tenemos una afección, y a todos nos ha ayudado muchísimo, incluso nos ayudamos entre nosotros. Que no te dé pena, verás que se convertirá en tu estilo de vida.
¡Suerte! 🙂
Hola!
Me interesaria saber mas sobre el tema, pero me da miedo toparme con falsos gurús. Estoy operada de la columna y no me la quiero jugar. Conoces a algun profesional de verdad en bcn o cercanias?
Gracias!!
Gracias por este post, realmente re-descubrir el yoga nos lleva al re-encuentro con una/o misma/o, es maravilloso! Llena y engrandece el alma. Namasté