Pelis para comérselas

¿Existe algo mejor que comer? Sí, ver películas sobre comida. Así nos lo cuenta Amanda.

Siempre he sentido algo casi mágico al ver a la gente cocinar. No hablo de chefs profesionales; hablo de todo el mundo. Abuelas que se atan con mimo el delantal mientras hierve el agua, abuelos que pelan papas como si tallaran pequeños diamantes, compañeros de piso que descubren cómo se hace la masa de pizza y no paran de hacerla, madres que te guisan un caldo mientras crees que vas a morir en el sofá, padres que inventan platos a base de latas de conservas, novios que preparan tu plato favorito cuando llegas del trabajo, novias que compran verduras en el mercado para cocinarlas contigo por la noche… Hay pocas cosas tan mágicas como ver a alguien cocinar, sea lo que sea. Yo creo que el mundo se para y sonríe cuando alguien se desconecta de la prisa, el ruido y el wifi y empieza a disfrutar.

El cine refleja muy bien esa magia que ocurre en la cocina y hace que brille aún más. Como no podemos oler ni saborear lo que vemos, la fantasía entra en acción y se nos hace la boca agua. ¿Nunca te han dado ganas de comer algo que normalmente no comerías sólo porque lo acabas de ver en una película? Ese hojaldre centenario que prepara con mimo una pastelera del pueblo, esa ensalada de verano que un cocinero remueve con las manos mojadas en aceite de oliva. La cocina en el cine puede ser cariñosa, brusca, conservadora, fusión, sexy… Hay ingredientes para todos los gustos.¿Te está entrando hambre? Vamos con una ronda de deliciosas recomendaciones para cuando necesites esconderte del calor del verano, o del frío del invierno (depende de desde dónde nos leas) y sumergirte en el maravilloso universo gastronómico. Ahí van:

Julie and Julia

Ay, pero qué grande está Meryl Streep en esta película, qué personaje más bonito y qué desparpajo tiene. Julie es una joven que vive en un pequeño apartamento de Nueva York. Un día decide que va a recrear cada receta de la gran dama de la cocina Julia Child. Mientras cuenta sus andaduras en su blog, la película vuelve continuamente a los años cuarenta y cincuenta para mostrarnos la apasionante y divertida historia de Julia. Una de mis películas de cocina favoritas, simplemente me encanta.

Chef

Recuerdo que entré al cine a ver esta película un día de verano y salí con un hambre impresionante mientras en mi cabeza no paraba de sonar salsa. No se qué comí después, pero seguro que no estaba tan rico como todos los bocadillos que pasaron por la pantalla. La libertad, la ilusión de sacar un proyecto adelante y la familia están presentes en toda la película. Chef es una peli para pasar un buen rato, sencilla, alegre, con comida y Sofía Vergara. Un buen plan.

El chef, la receta de la felicidad

Una comedia hispano francesa que te hace sonreír. Alexandre es un prestigioso chef con un gran ego que sufre un bloqueo cuando le presionan para que modernice su repertorio. Cuando ya lo da todo por perdido, aparece Jacky, un cocinero autodidacta y cabezota que se esmera en perfeccionar cada plato. Juntos pero no revueltos, emprenderán un plan para intentar revivir el menú de Alexandre, aunque no todo saldrá como esperan. El Chef es una comedia graciosa, fresca y simpática, ideal para pasar un buen rato observando la alta cocina desde casa.

Come, reza, ama

Aunque la parte de disfrutar de la comida se queda en Italia, yo no me perdería a Julia Roberts pidiendo café en una cafetería emblemática y disfrutando en mayúsculas de pastas, pizzas y helados romanos mientras se busca a sí misma. Dolce far niente, algo así como el placer de no hacer nada, es de las primeras expresiones que aprende en Italia y lo que me empuja a querer volver a ver a Julia comiendo spaghetti una y otra vez mientras me desestreso en el sofá.

Fuera de carta

Una de las comedias españolas con las que más me he reído en el cine. Los diálogos y chistes fáciles a veces hacen pensar que hemos retrocedido en el tiempo (además es del 2008) pero quitando ese detalle, puedes pasar un rato divertido. Maxi es dueño de un restaurante que aspira a la estrella Michelin, y entre hijos que vuelven, novios que llegan y cocina de autor, intenta volver a poner por delante su desastrosa vida personal.

Ratatouille

Un clásico sobre perseguir los sueños que no podía faltar aquí. Remy, la rata protagonista, es diferente a las demás ratas de su familia. Tiene un olfato maravilloso y sueña con ser chef; el problema es que… Es una rata y no será muy bienvenida en un restaurante. Aun así, se las apaña para conseguirlo aunque sea escondida en el gorro del joven principiante Lingüini. Peli Disney con recetas ricas y final feliz para todos los públicos.

Una pastelería en Tokio

De las mejores que he visto. Si eres de las que mira el reloj a cada minuto, esta no es para ti. No es porque sea larga, pues no lo es; pero es paciente, delicada, poética y muy, muy bonita.  Sentaro, que es un hombre muy serio, prepara Dorayakis en su pastelería cada día; pero no entenderá lo importante de hacer un buen relleno de judías dulces hasta que la anciana Tokue aparece como perdida en su tienda. A partir de ahí y a base de tolerancia, dedicación y paciencia, cada personaje elaborará su propia receta para ser libre y feliz. Asumo que no sueles tener Dorayakis por casa, pero ten a mano algo dulce para después, por si acaso.

Hasta aquí la lista de pelis para foodies o gente obsesionada con la cocina que no cocina mucho, como yo me definiría. Faltan muchas más películas, así que no dudes en añadirlas en los comentarios para que podamos conocerlas todas las frikis del mundo unidas.

Un abrazo a fuego lento.