Angy comparte con todes vosotres cuatro recetas de desayunos veganos que os van a hacer la boca agua. ¡Esperamos que os animéis a preparar alguno!
Lo mejor del frío es entrar en calor; y qué mejor forma de entrar en calor que sin hacerle daño a otros, sin provocar dolor o haciendo miserables sus vidas. Porque el disfrute personal libre de opresiones existe y la opresión que sufren los animales no humanos no debería ser menos ni de segunda categoría. Hay que recordar que una vida no vale vemos por andar a cuatro patas o no tener la espalda erguida.
Por eso hoy os traigo cuatro recetas con las que entrar en calor y libres de crueldad animal. Son fáciles, rápidas de hacer y seguro que no os cansáis de ellas.
¡Os aseguro que si puedo hacerlo yo, puede hacerlo cualquiera!
Chocolate caliente a la taza (y mucho glamour)
Ingredientes:
—1 taza de leche vegetal
—3 cucharadas de cacao a la taza
—1 taza de leche de coco
—1 cdta de sirope de agave
—1 cdta de esencia de vainilla
—Caramelo líquido
—2 o 3 onzas de chocolate negro
Elaboración:
Ponemos a calentar la leche vegetal en un cazo y, cuando veamos que empieza a hervir, añadimos las cucharadas de cacao, removemos hasta que quede bien espeso y dejamos reposar.
Cogemos la taza o vaso donde vayamos a depositar nuestro chocolate caliente y ponemos más o menos medio dedo de caramelo líquido aunque, recordemos, medidas así son siempre al gusto. Después, vertemos sobre él el chocolate caliente y vamos preparando la nata. Si tenéis una batidora con varillas –cosa que yo no- , seguramente conseguiréis que se os monte la leche de coco y dará más la sensación de nata montada tradicional.
La noche de antes, dejamos la leche de coco en el frigorífico, la cual se solidifica de forma considerable con el frío (sin llegar a congelarse) y se vuelve líquida con el calor. Al sacarla, la vertemos sobre un recipiente donde la montaremos y el cual habremos enfriado previamente unos diez minutos antes en el refrigerador. Una vez depositemos la leche de coco en él, añadiremos el sirope de agave y la esencia de vainilla en la misma proporción, una cucharadita.
Batimos todo bien con nuestra batidora de varillas (o en mi caso con las varillas de mano de forma manual) hasta que se nos monte o quede en el intento y dé sensación de nata.
La vertemos en el vaso donde habíamos dejado el chocolate caliente y, para una presentación que no deje indiferente a nadie, rallamos un poco de chocolate negro y partimos un par de onzas que introduciremos de forma desenfadada entre la nata. Voilà!
PD: Si nos sobra nata (de la leche de coco que habíamos montado), añadiendo un poco de chocolate a la taza, removiendo bien y dejándolo en el frigorífico una o dos horitas, tenemos una mousse de chocolate riquísima 😉
Mugcake a la taza
Ingredientes:
—1/4 taza de leche vegetal
—2 cucharadas de harina de avena (aunque sirve cualquiera en realidad)
—2 cucharadas de cacao en polvo
—2 cucharadas de aceite de oliva
—2 cucharadas de azúcar moreno
—1 cdta. de levadura
—Pepitas y chocolate (opcional)
Elaboración:
¡Si la elaboración del anterior desayuno te parecía fácil, esta es trifácil!
Elegimos la taza donde queramos hacer nuestro mugcake. En ella añadimos todos los ingredientes que anteriormente habíamos citado: la leche, la harina, el cacao, el aceite, el azúcar moreno, la levadura y, para que esté aún más rico, las pepitas de chocolate. Lo removemos todo bien con una cuchara grande y dejamos que repose unos minutitos.
Llevamos al microondas durante 3 minutos a máxima potencia ¡y listo!
Ya tenemos nuestro mugcake o mini bizcocho en taza. ¡Súper rápido y sencillo!
Tortitas de tres ingredientes
Ingredientes:
—½ taza de leche vegetal
—1 taza de avena
—1 plátano
—Canela (opcional)
—Sirope de agave o sirope de chocolate (opcional)
Elaboración:
Sobre un recipiente, vertemos la leche, la avena y el plátano que previamente trocearemos para que después sea más fácil de batir. Aquí es cuando decidimos, o no, añadir la canela. A mí personalmente me encanta su sabor y me gusta que la comida dulce tenga un regusto a la misma.
Una vez tengamos todos los ingredientes juntos en el mismo recipiente, los batimos bien hasta que quede una mezcla homogénea. Si queda demasiado espesa podemos añadir algo más de leche y seguimos el mismo procedimiento. Si por el contrario queda demasiado líquida, añadimos avena.
Precalentamos una sartén un minuto antes. Yo no suelo añadirle aceite porque así quedan un poco más esponjosas, pero esto también es al gusto y dependiendo de cómo le funcione a cada une. Vertemos nuestra mezcla sobre la sartén y esperamos a que se haga por uno de sus lados, lo cual suele tardar menos de un minuto. Una vez que vemos que está hecha, le damos la vuelta a la tortita y repetimos el mismo proceso. Y así con todas.
Cuando tengamos todas nuestras tortitas listas, podemos añadirle de manera opcional sirope de chocolate o sirope de agave y ¡buen provecho!
Gachas de avena
Ingredientes:
—½ taza de avena
—½ taza de leche vegetal
—1 taza de agua
—2 cucharadas de cacao en polvo
—Frutas al gusto para decorar
Elaboración:
Ponemos un cazo a calentar en el cual añadiremos la media taza de avena. Seguidamente vertemos sobre él la taza de leche vegetal y mientras removemos y tratamos de evitar que se nos pegue la masa creada al cazo, añadimos la taza de agua. Es muy importante remover las gachas constantemente para que no se peguen al cazo y no se nos quemen.
Cuando estén casi listas para retirar del fuego, añadimos las dos cucharadas de cacao en polvo y mezclamos bien.
Depositamos en el bol o recipiente elegido nuestras gachas y añadimos algunas frutas troceadas encima de ellas para darles color y sabor.
Bon appétit!
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