Tercer asalto

Mines se pregunta si realmente está tan manido el tema de la regla.

¡Hola a todas!

Ya estamos de vuelta en nuestro tercer mes de vida. Proyecto Kahlo comienza a tomar la forma que vosotras estáis queriendo que tome, y haciendo lo que todas pretendíamos que hiciese desde el primer momento: mostrar a chicas reales con algo inteligente que decir.

Cada Frida va encontrando su rincón favorito en Proyecto Kahlo. Están las que sienten la imperiosa necesidad de leerse todos los libros que recomendamos, las que prefieren reírse con nuestros artículos de opinión, o las que se ponen nuestras selecciones musicales en sus fiestas. También están las que no tienen que buscar ideas para ver pelis, porque se las damos en bandeja en nuestra sección de cine, o las que se encaprichan con unas manoplas hechas a mano en la sección de estilo. Pero normalmente, la que lee un artículo repite con otro, y eso nos hace pensar que algo estaremos haciendo bien, ¿no?

Este mes nos atrevemos con el color Rojo. Y estaba claro que iba a caer el tema de la regla. Sí, se habla mucho de la regla. Es un tema muy manido. O eso dicen…

Para mí, no es un tema tan manido cuando te encuentras mal en el trabajo y no dices claramente que tienes dolores menstruales, y prefieres decir que algo te ha sentado mal. No queda bien eso de irse a casa por algo que las demás también tienen y que «sufren» en silencio. Por mucho que tú sientas que tu útero va a salir de entre tus piernas y se va a ir a dar un paseo por la oficina.

No es un tema tan manido cuando algunas de nuestras parejas (masculinas, se entiende) sienten vergüenza si tienen que ir a comprarnos tampones. O cuando los anuncios nos dicen que apestamos. O cuando nadie nos dice que podemos aliviar el dolor masturbándonos. O cuando la mayoría de nosotras no usa la copa menstrual, ya sea por desconocimiento, pereza o recelo.

Pero eso no es lo único de lo que vamos a hablar este mes. Vamos a hablar de rojo vergüenza, de rojo pasión, de rojo asesinato, de ideología roja, de ira roja, de delicatessens rojas.

Por eso, si es que os sentís identificadas con alguno de estos sentimientos rojos (supongo que lo haréis: la última vez que os vi seguíais siendo humanas), daos un chapuzón en Proyecto Kahlo. Y contadnos vuestras impresiones, que para eso estamos aquí.

♥

Ah, y ¡feliz 2013! Que todos vuestros proyectos se hagan realidad, y que sigáis ayudándonos a que PK siga siendo el nuestro.

Mines