En las relaciones de pareja también existen las fronteras, los acuerdos y las normas a construir en función de lo que cada persona quiere. Porque lo importante es seguir el camino juntos pero también respetar lo que queremos individualmente.
Una pareja es un compañero de viaje. Cada uno vamos por un camino. Pero hay momentos en los que nos cruzamos con personas maravillosas de manera inesperada, personas que a veces van en nuestra misma dirección. A veces van en dirección opuesta pero no somos capaces de verlo y en ocasiones deciden, junto a ti, tomar un camino diferente, juntos, hacia la aventura.
Pero la vida es curiosa y muchas veces confiamos en que el camino de baldosas amarillas siempre nos llevará hasta Oz porque así nos lo contaron desde pequeños. Y no es así. Y nuestros caminos se separan y un día nos asombramos al mirarnos a los ojos y comprobar que, nadie sabe cómo, un día nos soltamos de la mano, un día yo giré a la derecha cuando tú no lo hacías y ahora estamos a millones de kilómetros de distancia. No es una distancia física sino emocional y no es que queramos que eso ocurra, sencillamente es que nuestros caminos se alejan y ya no van en la misma dirección.
Es imposible saber qué nos va a deparar la vida. Es dificilísimo asegurarle a alguien tu amor eterno aunque en estos momentos lo sientas como cierto, pero sí que hay cosas que pueden ayudarnos a que este camino que queremos recorrer juntos no sea ni el tuyo ni el mío sino el nuestro.
La verdad es que no soy muy fan de las normas, no me gustan las relaciones encorsetadas ni el “esto tiene que ser así” porque siento que esas situaciones nos limitan y, al final, algunx de lxs dos termina cediendo y eso, con el tiempo, cae por su propio peso. Lo que sí que me parece clave es el marcar ciertas fronteras si así lo sentimos, básicamente para respetar lo que somos, nuestra esencia, lo que creemos y queremos.
Hay puntos clave en las relaciones y, cuando somos adolescentes igual no nos paramos ni a pensar en ellos y es normal, aún estamos formando nuestro propio yo. Pero cuando ya sabemos qué queremos y qué no, no sirve de nada engañarse.
Con esto no me refiero a pautar de antemano quién va a conducir el coche en la próxima escapada que hagamos, o quién se va a duchar primero, o a quién le toca elegir película. De lo que hablo es de temas que separan caminos porque son cimientos de lo que somos o de lo que queremos ser. Por ejemplo, tener o no tener hijos, ver o no a otras personas fuera de la relación…
¿Y por qué hay tantas personas que comienzan relaciones sabiendo que hay un punto en el que vamos a chocar tarde o temprano pero no dicen nada? Pufff, miles de motivos. O entra en juego la magia del enamoramiento a hacer de las suyas y no lo queremos ver, o tengo miedo a perderte por ello, o me planteo que esas cosas no son tan importantes como mi pareja por lo que no ganan la batalla en la balanza o, lo que suele pasar una mayoría de las veces, pensamos que llegados a ese punto nuestra pareja cambiará de opinión. ¿Lo curioso de esto? Que nuestra pareja piensa exactamente lo mismo.
El no marcar esas fronteras que son tan importantes para nosotrxs nos va a llevar, la mayoría de las veces, a dos situaciones difíciles, incómodas y, lo que es peor: dolorosas. Llegamos al día D. :
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Unos se dan cuenta entonces que ese camino que creía que hacían juntos no era más que una ilusión, que en la realidad son dos caminos cosidos el uno al otro y que las costuras ya se han roto. Ha sido un paseo precioso. ¡Buen viaje compañerx!
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Otros ceden a los deseos del otro aún a pesar de no estar convencidos, se dejan llevar y entierran esa parte suya 3 metros bajo el suelo, deseando que un día no vuelva en modo zombie a perseguirles.
En nuestro camino juntos nos vamos a encontrar muchos imprevistos, que si nos quedamos sin gasolina, que si nos hemos pasado la salida pero es realmente injusto que nosotros mismos nos pongamos peajes y calles cortadas, que seamos nosotros los que nos autosaboteemos…
Por eso, si hay algo que es importante para ti, hay algo que tienes muy claro que quieres, tienes derecho a aferrarte a ello y a encontrar una pareja que quiera emprender ese camino contigo. Porque si hay algo bonito en esta vida es crear un mapa juntos e ir disfrutando de nuestro mundo.
4 Comentarios
Totalmente de acuerdo e incluso me identifico mas con «marcar fronteras». Un abrazo y gracias por compartir tantos artículos y responder los comentarios.
Otro abrazo para ti 🙂
Hola, Por lo regular no hago comentarios ya que me encanta lo que escriben, pero esta vez es importante decirlo,no acertaron en el tema, ya que el titulo de articulo es CREANDO UN MAPA JUNTOS, y solo habla de eso al final y algo asi como ¡bueno si decides estar en pareja, lucha y crea un mapa juntos¡, mientras al principio hablan solo de caminos diferentes que toma una pareja, hablan de que no funciona, etc, etc, así como mencionan sobre normas a establecer y nunca me quedo claro, me da penita decirlo pero no me dejo nada el articulo. Soy una mujer casada y se perfectamente que el matrimonio no es fácil y efectivamente debes crear un mapa juntos, debes crear tus propias normas, creencias, valores, etc… algo complicadisimo pero no imposible, asi como el tomar caminos diferentes, pero considero que se podría habla en base a los espacios que necesitamos como personas, en el matrimonio también necesitamos nuestro espacio para que pueda funcionar, no todo debemos hacerlo juntos. El matrimonio es una lucha constante, enamorar a tu pareja todos los dias, ser amigos, aprender a resolver problemas y sobre todo tenemos que aprender a !vivir¡ para poder ser felices y hacer felices a los demás.
Les mando un fuerte abrazo y espero que mi comentario no se malinterprete.
Hola Claus, siento si el título del artículo no te pega con lo que luego encuentras en él. Normalmente escribo el título cuando lo he terminado y tengo cierta tendencia a quedarme con lo positivo por lo que pasé de llamarlo «Marcando fronteras» al actual, mi fallo y mi error 🙂 tienes toda la razón!
La idea del artículo no es la «lucha» durante la relación (que, como bien dices, hay que trabajársela) sino el marcar ciertas fronteras (cuando existan, claro) en temas que sean realmente importantes y no apartarlos de lado para luego chocarnos contra el mismo muro una y otra vez.
Gracias por el comentario, espero que disfrutes de tu relación y que seas muy feliz 🙂
un besito!