Mujer contra Mujer

Nada tiene de especial, dos mujeres que se meten mano. El matiz viene después, cuando se va de las manos. En este artículo Núria habla de violencia y malos tratos en relaciones de mujeres lesbianas o bisexuales.

 

Ilustración: Cereza

 

La violencia y las relaciones de malos tratos pueden darse en cualquier relación, ¿por qué no iba a darse en una pareja de mujeres? No deja de sorprendernos, nos parece mentira que esto ocurra entre dos mujeres, pero amigues del patriarcado, nadie se libra. Sin embargo, hay que diferenciar esta violencia de la violencia machista. La violencia de los hombres hacia las mujeres viene “avalada” por el sistema, ya que los hombres mantienen unos privilegios tanto a nivel personal como colectivo, y las mujeres lesbianas (o bisexuales) que ejercen violencia o maltratan se benefician de forma individual, no de forma estructural . No podemos comparar la violencia machista con este tipo de violencia, pero tampoco podemos seguir silenciando que existen mujeres lesbianas o bisexuales que ejercen violencia o malos tratos hacia otras mujeres. Si invisibilizamos esta realidad, estaremos dando la espalda a mujeres que necesitan nuestro apoyo.

La orientación del deseo no te hace inmune al sistema de relaciones heteropatriarcal con el que convivimos desde que nacemos, para las mujeres lesbianas o bisexuales es también el único referente, no hay otro. Un sistema basado en los mitos del amor romántico: en los celos, la fusión, la media naranja. Un sistema que defiende que une tiene derecho sobre el otre. Cuando una mujer (lesbiana o bisexual) está con otra mujer (lesbiana o bisexual) y viven una relación desigual, es porque hay una que asume este rol de poder y se coloca por encima de la otra ¿y eso no es violencia? Según R.A.R.A.S.S. se ha definido como: “Una dinámica de dominio unidireccional ejercido y establecido mediante patrones de comportamiento que buscan sometimiento, naturalizándose consistentemente con el empleo de tácticas continuas desestabilizadoras y cíclicas hasta hacerse crónicas. Estas tácticas de control y aislamiento- que pueden incluir o no amenazas, agresiones físicas y sexuales- son utilizadas sistemáticamente por una de las mujeres/lesbianas con el objetivo central de controlar los pensamientos, las creencias, los recursos, los espacios y hasta la conducta de su(s) compañera(s), o de la(s) mujer(es) con quien-(es) esté saliendo o haya salido y/o tenido una relación cercana en el pasado”.

Viví en una relación así con otra mujer un año de mi vida. Pensaba que ella o yo cambiaríamos algún día. Pero ese día no llegaba nunca. Me hizo pensar que estaba loca, que tenía un trastorno de personalidad. Me hizo creer que el amor es sacrificio y que como no lo daba todo por amor, era una egoísta. Pero es que también me llevaba con su moto a tres metros sobre el cielo. Nunca pensé que esto fuera a ocurrirme a mi, tan moderna y feminista….¡JA! Escuchar a Pamela Palenciano en su monólogo “No sólo duelen los golpes” hace unos meses, fue revelador. Me hizo ponerle nombre y apellidos a mi relación y sobre todo, me ayudó a deshacerme de la culpa. Porque como le dijo a Pamela su psicóloga: toda acción tiene su reacción. Y yo me sentía culpable de haberle gritado cuando discutíamos, de haber amenazado cientos de veces que la dejaba y que luego, era incapaz de hacerlo. El día que no pude más, salí corriendo. Lo que no sabía era que esa factura, me iba a costar tanto tiempo pagarla.

Crecemos con la imagen de que un violador, maltratador…es alguien que aparecerá de las tinieblas y tendrá el aspecto del jorobado de Notre Dame por lo menos. Por eso, cuando es la persona a la que amamos, con su carisma y su cara bonita, nos cuesta ver al monstrue. También es difícil si hemos crecido con: “los que se pelean, se desean”, las pelis de Disney o escuchando canciones donde “cada vez que me miras, muero de amor”. Pero que quede MUY claro, la culpa es sólo de quien usa su poder, no es nuestra.

Nadie se merece vivir en una relación así. El amor no duele. Que nadie os haga creer que el amor es lucha, sufrimiento y sacrificio, ni los celos son la prueba de vuestro amor. Desde entonces éste es mi mantra particular y “Contigo” mi canción de amor favorita:

Yo no me muero sino estás aquí
Puedo andar bien caminando sin ti
No me haces falta ni eres mi media naranja en la vida
Voy aprendiendo a curarme yo misma todas mis heridas

Pero contigo, es cierto que el mundo parece un poco menos feo
contigo, es cierto que romper las cadenas duele un poco menos
y aprendo contigo y contigo camino
Me encanta todo lo que hemos compartido
Tirando barreras, rompiendo los mitos
Te quiero libre, y me quiero libre contigo

(…)

Los Comentarios están cerrados.

Navegar

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies