Mujeres contra la Impunidad

La periodista Mónica García Prieto y la fotógrafa Carole Alfarah radiografían la dura y sangrante realidad de Siria.

Fotografía: Carole Alfarah

La Casa Encendida junto a la Asociación de Mujeres de Guatemala (AMG) concluyeron la semana pasada el ciclo anual de conferencias de Mujeres contra la impunidad, con la presencia de la periodista especializada en Oriente Medio, Mónica García Prieto y la fotógrafa de origen sirio, Carole Alfarah. Mercedes Hernández, presidenta de la Asociación de Mujeres de Guatemala (AMG), abrió la conferencia apelando a “la necesidad de la celebración de este tipo de encuentros que fomentan el diálogo y buscan la concienciación sobre realidades muy duras” e interpeló a “la responsabilidad que la comunidad internacional debe asumir en la que está camino de ser la mayor crisis humanitaria de este siglo”.

A lo largo de hora y media, las ponentes ofrecieron una visión complementaria de una misma realidad: La de un conflicto bélico que resulta a todas luces desgarrador y alarmante por el incesante goteo de víctimas inocentes y por la desidia de las instituciones internacionales para poner fin a dicha barbarie. Mientras Mónica se centró en relatar y desgranar las terribles cifras de una guerra que dura ya algo más de cinco años, Carole realizó un recorrido eminentemente visual – apoyado en sus fotografías – y confesaba a los asistentes con sincera humildad “mi herramienta de trabajo son las imágenes, no las palabras.”

El conflicto bajo la mirada del objetivo

Más de 366.000 muertos, cerca de 7 millones de desplazados internos, 4,8 millones de refugiados en países vecinos… Las cifras son escandalosas, pero la “supuesta” lejanía del conflicto parecen no afectar a las sociedades occidentales, salvo cuando parece que van a ser “invadidas” por cientos de miles de civiles completamente desarmados y en búsqueda, no ya de un futuro, sino de un presente “digno y con cierta esperanza”. Prieto explicó a los asistentes el germen del conflicto bélico, incomprendido en gran parte por “la distorsión que los medios de comunicación han hecho del mismo al simplificar la realidad: La de que los rebeldes que luchan por derrocar la dictadura de Bashar al Assad son islamistas radicales” apuntaba.

Aunque dicha afirmación pueda albergar una ínfima parte de verdad, dado el desarrollo del conflicto en estos años, Mónica ofreció una radiografía mucho más profunda y contrastada debido a su trabajo sobre el terreno. “Siria ha sido y es, desde el comienzo, un tablero de ajedrez en el que las principales potencias mundiales – Estados Unidos, Rusia, La Unión Europea y los países vecinos de la zona – intervienen o dejan de hacerlo atendiendo a sus propios intereses” afirmaba. “Yo, como tantos otros, albergaba la esperanza de que con la creación de Naciones Unidas tras la II Guerra Mundial, este tipo de conflictos y situaciones no volvieran a repetirse, pero lamentablemente ahí están las guerras de los Balcanes, Chechenia, Líbano, Iraq o ésta, entre tantas otras”.

Entremedias de estos datos, para nada fríos, Mónica mostró la célebre campaña de la ONG Save the Children de Reino Unido para ilustrar que los más vulnerables en cualquier guerra son los niños y compartió las imágenes recopiladas durante estos años con su cámara para mostrar la devastación de un país que hace no tanto tiempo fue tierra de acogida, tolerante y laico, “muy alejado de ese radicalismo religioso que tratan de vendernos en Occidente sembrando el miedo y alimentando la ignorancia del que es distinto a nosotros” sentenciaba.

El álbum de la desolación

Para eso estaba Carole Alfarah, fotógrafa de origen sirio que tomó el relevo a Mónica para mostrar otro enfoque de la misma desasosegante realidad, y lo hizo dejando que fueran sus imágenes – su lenguaje natural – las que hablaran. Alfarah realizó un breve recorrido por su trabajo antes del estallido del conflicto en 2011, un trabajo basado “en el retrato de las clases marginales de mi país. Porque antes de esta guerra civil, en Siria ya había pobreza, falta de escolarización de muchos niños en escuelas… Así que podéis imaginar cuál habrá podido ser el destino de muchas de estas personas que yo retraté en su momento. La situación ha empeorado por diez” lamentaba.

A medida que se adentraba en su trabajo fotográfico a raíz de la guerra civil desatada en el país, a Alfarah se le quebraba la voz rememorando episodios traumáticos y de una crudeza extrema y dejaba claro que “la violencia, la guerra que, ha sido creada por el ser humano, no forma parte de mi trabajo artístico, pero sentía que de alguna manera debía recogerlo para que quedara constancia de lo que está pasando” puntualizaba. Ante la fotografía de un charco de sangre en el suelo, tras el estallido de una bomba en una plaza céntrica de Damasco, decía “Esta imagen creo que es suficiente para ilustrar una escena que en vivo era desoladora y lamentablemente la cámara no recoge algo tan horrible como el olor a cuerpo calcinado”.

La sucesión de instantáneas no escapaba al horror: familias hacinadas en cuartos de la electricidad, una sucesión de campamentos de refugiados en condiciones muy mejorables, habitaciones vacías de lo que fue el hogar de alguna familia arrasadas por las bombas… A Carole le resultaba difícil explicar “cómo mi país había pasado de ser un país receptor de refugiados a convertirse ahora en uno emisor” e insistía en que su gente “sólo quiere dignidad y que se ponga fin al conflicto”.

En medio de esta travesía visual estática, pero agitadora de conciencias, Alfarah compartió además dos vídeos apoyados también en imágenes en los que mostraba el caso de una refugiada siria en Dinamarca y el duro tránsito que había tenido que hacer para comenzar de cero una nueva vida. Y es que si algo queda claro es que mientras algunos “juegan” su particular partida en este macabro juego, Carole Alfarah y Mónica García Prieto fueron las caras, las voces y las portavoces de todos aquellos desamparados que ansían ser escuchados para contar su verdad – sin ruido interesado – en esta guerra que dura ya demasiado tiempo.

 

Crónica de Ana M. Caballero Botica

Los Comentarios están cerrados.

Navegar

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies