Aloe vera, rosa mosqueta, avena, árbol de té… ¿De dónde vienen y para qué podemos usarlas?
Los remedios a base de plantas son usados desde tiempos ancestrales. Las soluciones naturales para la curación de enfermedades pueden ser administradas vía interna o externa, siendo necesaria en el primer caso la supervisión de un médico especializado, sobre todo en el caso de enfermedades graves.
Os hablaré de las plantas mas comunes de uso cosmético, que son las que nos conciernen:
Métodos de extracción principales y administración externa
- Aceites esenciales: Se usan tan solo unas gotas añadidas a una base dependiendo de cómo los queramos usar. Podemos añadirlas a la crema hidratante para el rostro, aceites vegetales para el cuerpo o las puntas del cabello, champú, mascarillas de arcilla o manteca de karité, baños e incluso hacer enjuagues bucales. Vienen muy concentrados y hay que ser muy precavidos a la hora de usarlos.
- Aceites vegetales : Los podemos usar de múltiples maneras, que dependerán de su pureza. Los más puros sirven para hidratar el rostro; para otros usos podemos optar por algunos más destilados que serán más económicos, se pueden usar para masajes corporales, como mascarilla capilar, desmaquillante de ojos y como portadores para los principios activos de los aceites esenciales.
- Aguas florales: Es el agua resultante del proceso de destilación de las plantas para obtener sus aceites; se usan como tónicos faciales.
Plantas mas básicas y sus propiedades
Caléndula
Posee propiedades fungicidas, antisépticas y antiinflamatorias. Se suele aplicar mediante compresas o pomadas.
De ella se usan los pétalos, que se extraen frescos y se maceran.
Es ideal para heridas y también muy recomendada en casos de psoriasis.
Pepino
El pepino es muy usado en cosmética. Su jugo es ideal para refrescar, suavizar y calmar la piel.
Puede usarse a modo de mascarilla haciendo un batido de su pulpa, o como tónico con el zumo exprimido con licuadora.
Romero
El romero se usa para combatir la caída del cabello, fortalecer el folículo capilar e incluso en problemas de caspa.
Se pueden añadir unas gotas de aceite esencial directamente en el champú que solemos usar y también preparar infusión con la planta fresca para darnos baños capilares.
Árbol de té
Se obtiene a partir de las hojas del arbusto y de ellas se extrae su aceite esencial. Se usa para combatir bacterias, hongos y virus, lo que lo convierte en un potente antibiótico natural.
Hay que ser muy cauto a la hora de usarlo, porque puede resultar muy irritante para la piel.
Usa una o dos gotas en una mascarilla de arcilla verde para pieles grasas y acneicas, o directamente con un bastoncillo sin excederte con la cantidad.
Aloe Vera
En general se usa en pieles irritadas para aliviar posibles picores, dermatitis, quemaduras de cualquier tipo o picaduras de insectos.
De ella se extrae el gel solidificado obtenido a partir de las hojas. Este jugo comienza a ser efectivo a partir de que la planta ya es adulta.
Se puede usar como agente portador añadiéndole una gota de aceite esencial, dependiendo de la afección de la piel; por ejemplo, en pieles grasas o acneicas funcionaría muy bien con una gota de aceite esencial de árbol de té.
Rosa Mosqueta
Tiene propiedades regenerantes y cicatrizantes. Se usa en pieles envejecidas, con manchas o cicatrices recientes para reducir las señales.
Arnica
Es una florecilla perfecta para tratar contusiones (moratones) o torceduras en articulaciones. Calma el dolor y la hinchazón y reduce posibles hematomas.
Se puede preparar una tintura dejando macerar las plantas en alcohol de 70, en la proporción de 50g de planta por 500ml de alcohol. Se deja en un frasco de cristal tapado durante una semana expuesto al sol. Una vez macerado hay que guardarlo en un recipiente bien cerrado y en un lugar fresco y seco.
También se pueden hacer maceraciones en agua destilada o aceite de almendras del mismo modo.
Avena
Las semillas de avena funcionan de maravilla también en pieles irritadas y con psoriasis.
Se usa su leche poniendo a cocer copos de avena en agua (mineral) y luego colando el líquido blanquecino fruto del almidón que suelta la avena.
Este líquido hay que guardarlo en un bote cerrado y en la nevera, puesto que no tiene conservantes y su duración es limitada.
Se puede usar en el rostro para calmar, como un tónico, con un algodoncillo o un difusor de spray. También se pueden realizar baños si existen problemas de psoriasis en el cuerpo.
Hamamelis
Es el astringente más usado en belleza, se suele usar en forma de agua de hammamelis o pomadas, dependiendo del uso que le queramos dar.
Es el tónico perfecto para el rostro, pero en forma de pomada es ideal en pequeños cortes o pieles irritadas.
Recomendaciones según el tipo de piel
- Piel seca, sensible o castigada.
- Aceite esencial de rosa mosqueta.
- Aceite vegetal de almendras, onagra, rosa mosqueta o jojoba.
- Agua floral de camomila o rosas.
- Manteca de karité para mascarillas.
- Piel mixta, grasa o acneica.
- Aceite esencial de árbol de té.
- Aceite vegetal de cáñamo, argán, jojoba o avellana, siendo desaconsejado el uso de aceites en pieles con acné o muy grasas y sustituyéndolo por gel de aloe vera puro.
- Agua floral de hamamelis para pieles mixtas-normales y de romero para pieles muy grasas.
- Arcilla verde para mascarillas.
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